Cómo se elige al donante de esperma

Ante los tratamientos de fertilidad y las diferentes alternativas al embarazo natural existe una legislación perfectamente articulada y clara y la donación de semen y óvulos no son para menos, Se rigen por diversas leyes que amparan a ambas partes durante el proceso. En este sentido, tanto los centros sanitarios públicos españoles donde se lleve a cabo el tratamiento como las clínicas privadas de reproducción asistida han de acogerse a este marco legal.  Y ellos serán los garantes de que la selección del donante cumpla con la ley establecida al respecto.

Así se escoge el perfil del donante de semen

Si te cuestionas cómo se elige al donante de esperma te mostramos en Serás mamá los criterios de selección siempre deben ser los mismos en cuanto la donación de semen y se basan en procedimientos estrictos aplicados por la clínica o centro.

1. Edad. Los donantes han de ser mayores de edad y no superar los 35 años. En verdad, se puede donar hasta los 50 años pero la gran mayoría de las clínicas no seleccionan donantes mayores de 35
2. Estado de salud. Para donar semen es necesario tener un buen estado tanto físico como psiquíco. Esto se corrobora a través de diversos análisis y pruebas y también con entrevistas y test psicotécnicos para valorar el estado psicológico
3. Ausencia de enfermedades, especialmente las hereditarias como diabetes, fibrosis quística, espina bífida o epilepsia, entre otras. Igual que en el punto anterior, las pruebas médicas a las que se someten los donantes determinan su idoneidad.
4. Tener una buena calidad seminal. Durante el procedimiento, el donante ha de presentarse en la clínica una vez por semana durante 6 meses para la recolección de muestras.

Además de seguir ciertas pautas a la hora de prepararse para la donación de semen existen otros requisitos que debe cumplir el donante de semen se basan en que practique la abstinencia los días anteriores a la entrega de la muestra y mantenga un estilo de vida saludable durante el proceso.

Posteriormente, cuando la muestra se considera de excelente calidad y es aceptada, se envía al banco de semen donde se vitrifica (congela) durante otros 6 meses más para descartar la incubación de cualquier otro tipo de enfermedad. Si en ese tiempo no muestra alteraciones, se la considerará apta.

Por su parte, los receptores de semen pueden seleccionar, asesorados en todo momento por la clínica, los rasgos físicos e inmunológicos más compatibles con ellos. Entre estos se encuentran el color de pelo y ojos, la complexión y altura, el tono de piel o incluso el grupo sanguíneo. Este tipo de datos serán los únicos que los receptores conocerán acerca del donante, teniendo que obviar cualquier otro de carácter personal.

Como puedes comprobar la elección del perfil del donante de semen o esperma es muy minuciosa. En España, la donación de semen se considera un acto altruista por lo que solo se le ofrece una ligera compensación económica de unos 50 euros por donación a la persona que cede su semen.

Cómo se gestiona la privacidad del donante de esperma

La privacidad en la identidad del donante de esperma es fundamental en la legislación española. Así, la Ley de Reproducción Asistida de 1988 la ampara.

Actualmente, no existe un registro único de donantes con cifras oficiales pero sí que se sabe que tampoco hay escasez en los mismos.

Como decíamos, los pacientes receptores solo podrán conocer rasgos a gran escala de los mismos, para evaluar su parecido (rh, edad, características físicas)…

Por su parte, el donante solo tienen derecho a conocer si el tratamiento con su semen ha ido bien y cuantos “hijos” han nacido de sus donaciones. Para que no haya problemas genéticos en el futuro, en nuestro país se permite un máximo de 6 “hijos” por donante.

Solo en los casos en los que se contemple alguna alteración genética en el feto o bebé se puede solicitar mayor información del donante, como su historial médico, incluso aunque hayan pasado años desde la donación. Eso sí, habría que acudir a una orden judicial para poder acceder a este tipo de información y los padres nunca contactarían con el donante directamente.