Hay ciertos momentos del año que no se que pasa, les ponen algo en el agua, hay un complot o vete a saber que… pero de golpe todas están embarazadas y nadie te ha invitado a la fiesta. Mires a donde mires ves barriguitas, tus conocidas te llaman para decirte que están embarazadas, toda mujer en edad de concebir lo ha logrado.
En estos momentos lo normal es alegrarte por todas ellas, pero si estás tratando de quedarte embarazada y no llega tienes que lidiar con otro sentimiento, en el fondo tienes un pequeño pinchacito de envidia y dolor ¿Qué a pasado con el tuyo? ¿Y porque todas se empeñan en decirte que no te preocupes que esto es contagioso? Sin quererlo nos vemos en medio de una batalla de sentimientos, por supuesto que te alegras por todas ellas, pero no hay manera humana de evitar esa envidia ¿Cómo no sentirla?
No hay manera correcta o incorrecta de lidiar con estos momentos, no hay ni buenos ni malos. Lo único que nos queda es confiar en que en algún momento formaremos parte de ese maravilloso fenómeno de baby boom y alegrarnos por todas esas chicas que también han luchado incansablemente y ahora lo han logrado porque a pesar de que a veces lo veamos todo tan negro que no hay lugar para la esperanza… los sueños se cumplen y algún día saltaremos la barrera.
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