Cuando pensamos en el embarazo muchas veces nos es imposible separar la gestación de nuestras obligaciones diarias: ir a trabajar, hacer la compra, estudiar. La ciudad muchas veces nos impone un ritmo que no podemos abandonar del todo ni estando embarazadas.
Pese a ello, es importante que consigamos encontrar algún hueco en nuestra agenda para permitirnos unos días de relax que, sin duda, nos vendrán muy bien a nosotros y a nuestro bebé.
Pero descansar no es la única receta para un embarazo saludable y sin riesgos. Debemos combinar el descanso con actividad física suave, cuyos beneficios han quedado ya sobradamente demostrados, como la mejora de la función cardiovascular, la reducción de la probabilidad de sufrir diabetes asociada a la gestación, mantenimiento de un peso adecuado, mejora del estado de ánimo y, como no, un mejor descanso nocturno gracias a la reducción de tensiones musculares y el cansancio producido por el ejercicio.
Muchas de las actividades que nos pueden beneficiar durante nuestro embarazo son las siguientes:
- Andar. Dar largos paseos a una velocidad moderada es un gran ejercicio que nos permite mantener nuestra forma física sin comprometer la salud del feto ni la nuestra. Si además caminas en terrenos rurales y de montaña, la experiencia es todavía más beneficiosa, ya que respirarás aire puro y la oxigenación que recibirá tu bebé será de gran calidad. Una buena idea es visitar lugares de gran belleza natural que te aporten calma y paz. Ello, unido a las endorfinas que liberarás al hacer ejercicio, te aportará esa tranquilidad que tu cuerpo tanto necesita.
- Musculación. No estamos hablando de ponerse fuerte como un culturista, sino de mantener tus músculos firmes y tonificados. Eso dará soporte a tu sistema esquelético, facilitando además el parto si has trabajado la zona de las piernas, sobre todo en la cara interna de los muslos. Además, evitarás o reducirás la aparición de varices y calambres, tan frecuentes en el embarazo.
- Practicar el baile. Mientras no sea un baile que incluya pasos bruscos, saltos o giros extraños para tu cuerpo, bailar puede ser una actividad de lo más beneficiosa para ti. Además de divertida, mantiene tus articulaciones engrasadas y tu corazón fuerte. Puedes acudir a un gimnasio, ya que en muchos de ellos tienen programadas sesiones de baile especialmente pensadas para embarazadas que, como tú, quieren estar en forma y pasar un rato divertido.
- Yoga. Esta disciplina milenaria te ayuda a tonificar los músculos de tu cuerpo y a relajar tu mente, haciendo real aquél viejo dicho de Mens sana in corpore sano. Una gran alternativa a practicarla en un gimnasio es hacerlo al aire libre, con todos los beneficios que ello conlleva y que te hemos explicado en el apartado dedicado a andar.
- Natación. Por último, nadar es uno de los mejores ejercicios que podrás realizar estando embarazada, sino el mejor, ya que trabaja todos los músculos del cuerpo, tanto del tronco inferior como del superior, mejora la capacidad cardiopulmonar y te ofrece un gran alivio cuando ya estás alcanzando un peso y volumen considerables, ya que en el agua apenas sentirás su carga.
No olvides que el exceso de ejercicio puede afectar a la fertilidad tanto masculina como femenina, produciendo desequilibrios hormonales.