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Recuperar la figura tras el embarazo es el objetivo estético que se proponen muchas mujeres después de dar a luz.
Actualmente, el avance de la cirugía estética pone a nuestro alcance un amplio abanico de tratamientos que se pueden llevar a cabo tras el parto. Para ello, puedes escoger centros de cirugía estética de Barcelona o en otra ciudad de España y elegir el tratamiento más adecuado según tus necesidades.
¿Quieres saber cuáles son exactamente los tratamientos de cirugía estética a los que puedes recurrir para recuperar la línea tras dar a luz? ¡Lo vemos!
Tratamientos de cirugía estética después de ser mamá
Ser mamá es una de las experiencias más bonitas. Sin embargo, también supone un cambio muy radical en el cuerpo de la mujer.
Y es que, tras la maternidad, cada vez son más las mujeres que quieren recuperar la figura que tenían antes del embarazo. Por tanto, deciden recurrir a tratamientos de cirugía estética para conseguir su objetivo.
1. Aumento de pecho: mamoplastia
Desde los primeros meses de embarazo, el pecho crece en volumen para prepararse para la lactancia. Por ello, cuando pasa la fase de la lactancia, se puede optar por una cirugía de aumento de pecho o mamoplastia.
Concretamente, la mamoplastia de aumento consiste en colocar un implante de silicona en el polo superior e inferior de cada pecho, justo detrás del músculo y debajo de la glándula mamaria.
Esta operación es una de las más habituales y permite levantar el pecho caído tras el embarazo y la lactancia. De este modo, recupera su forma original.
Este tratamiento estético se puede llevar a cabo, incluso, cuando la mujer desea tener más hijos. Esto se debe a que el cirujano inserta las prótesis alrededor de la areola, en el cuadrante inferior, respetando la glándula mamaria.
De esta manera, la mujer no tiene por qué renunciar a la lactancia en embarazos posteriores y, además, conserva una sensibilidad normal en la zona.
Como alternativa a la colocación de implantes, también se puede recurrir a infiltraciones de tejido adiposo en el polo superior del pecho. Esta opción está recomendada si la mujer se ha realizado una liposucción en el abdomen o en las caderas. Posteriormente a este tratamiento, se puede utilizar la grasa sobrante para aumentar el volumen del pecho.
2. Abdominoplastia
La flacidez abdominal es otra de las consecuencias directas del embarazo. No obstante, a través de la abdominoplastia, se puede devolver la firmeza que tenían los músculos del abdomen antes de la maternidad.
En esta operación, se eliminan los pliegues de piel y la grasa sobrante de abdomen. Al mismo tiempo, se tensan los músculos con una incisión en la zona del pubis. Algunas mujeres, incluso, aprovechan esta intervención para quitar la cicatriz originada por una cesárea.
Sin embargo, también existe otro método para eliminar la piel sobrante del abdomen. Se trata de la lipectomía, un procedimiento quirúrgico que mejora el contorno del abdomen mediante la retirada del exceso de piel y tejido graso. Se caracteriza por ser una intervención poco invasiva y de baja complejidad.
3. Perineoplastia
Con el parto, la pared del suelo pélvico y las estructuras musculares de la zona se ven alteradas. Por ello, es frecuente optar por la episiotomía.
En cambio, para la reparación funcional y estética de la zona íntima de la mujer, otra de las alternativas que brinda la cirugía estética es la perineoplastia. A través de esta intervención, se reconstruye la zona íntima de la mujer y se corrige la cicatriz de la incisión que provoca la episiotomía.
Después de convertirte en mamá, existen muchas opciones para mejorar tu estado físico. En función de lo que busques, deberás optar por un tratamiento u otro. Lo esencial es ponerte en manos de expertos que te asesoren sobre cuál es la alternativa ideal para ti.